¿Qué son los niveles neuro-lógicos?
Los niveles
neuro-lógicos son un modelo comunicativo muy utilizado en Programación
Neuro-Lingüística (PNL) y en Coaching. Fueron
desarrollados por Robert Dilts basándose previamente en la teoría de los
niveles lógicos de Gregory Bateson. Dependiendo de la escuela de PNL o Coaching
que nos encontremos los podemos encontrar como niveles Neuro-lingüísticos.
Constituyen una
herramienta tremendamente sencilla y eficaz para conocer el grado de influencia
de los mensajes que recibimos a lo largo del día y, a su vez, para modular el
grado de influencia de los mensajes que emitimos. Dichos niveles están
jerarquizados y se estructuran de la siguiente manera (vamos a nombrarlos de menor a mayor trascendencia):
Entorno: responde a las preguntas
¿dónde y cuándo? Los mensajes que se producen en este nivel lógico hablan de
todo aquello que nos rodea. Por ejemplo, un niño ha hecho un examen de
matemáticas y ha suspendido. Un mensaje dirigido al nivel lógico de entorno
sería el siguiente “el aula estaba llena de distracciones: puertas y ventanas
abiertas y además la hora era muy mala, después de educación física cuando
estaban todos cansados”.
Conducta: responde a la pregunta ¿qué? Se
centra en las acciones determinadas que ha hecho un sujeto. Volviendo al caso
anterior el mensaje que haría referencia a este nivel lógico sería el siguiente
“el niño ha suspendido el examen de matemáticas” ya que nos centramos en la acción concreta.
Habilidades: responde a la pregunta
¿saber cómo? Se centra en el conjunto de destrezas que una persona en concreto
ha desarrollado. Para comprender bien este nivel siguiendo el ejemplo del
examen de matemáticas una frase ilustrativa sería la siguiente: “el niño no
sabía cómo hacer reglas de tres y por eso ha suspendido”.
Capacidades: responde a la pregunta
¿cómo? Con frecuencia se suele agrupar con el nivel anterior, pero hemos
decidido separarlo para aumentar el grado de precisión a la hora de analizar la
información. Si las habilidades correspondían a las destrezas, las capacidades
corresponden a la posibilidad que tenemos de aprender dichas destrezas.
Una persona puede tener más capacidad de memoria que otra sin embargo la otra
ha podido desarrollar más destrezas mnemotécnicas. Una frase que nos llevaría a
este nivel sería “el niño tiene baja capacidad para aprender conceptos
matemáticos”
Creencias: responde a la pregunta ¿por
qué? Hace referencia a las ideas que una persona tiene sobre el mundo que le
rodea. Un ejemplo de esto podría ser “Las matemáticas son difíciles de enseñar
y de aprender”.
Valores: al igual que el nivel anterior
responde a la pregunta ¿por qué? De hecho muchas veces se presenta agrupado con
el nivel de creencias, pero no es lo mismo ya que los valores implican no sólo
creencias sino actitudes y preferencias ante la vida como justicia, libertad,
seguridad, salud, dinero, comodidad, etc… Los propios valores se nutren de
creencias subyacentes. Siguiendo la secuencia anterior un ejemplo podría ser “las
matemáticas son fundamentales para el desarrollo personal”
Identidad: responde a la pregunta
¿quién? Este nivel lógico hace referencia
directa a la “esencia” de la persona y sus cualidades. “El niño que ha
suspendido el examen es torpe”.
Meta-identidad: responde a la pregunta
¿para qué? También es conocido como espiritual. Se refiere a todo aquello que
trasciende a la persona. “Gracias a la educación la humanidad ha podido ser lo
que es hoy”.
Los niveles lógicos, como hemos visto, tienen una jerarquía. Un cambio en un nivel superior, condiciona todos los niveles inferiores. Por ejemplo, si tenemos la creencia de que las matemáticas son imposibles de enseñar y somos profesores, es posible que no desarrollemos capacidades y destrezas para enseñarlas y nuestras acciones a la hora de enseñarlas dejen mucho que desear. En cambio si creemos que no es fácil enseñar matemáticas pero tampoco imposible puede que desarrollemos nuestras capacidades para dar lo mejor de nosotros mismos enseñándolas.
Los niveles lógicos, como hemos visto, tienen una jerarquía. Un cambio en un nivel superior, condiciona todos los niveles inferiores. Por ejemplo, si tenemos la creencia de que las matemáticas son imposibles de enseñar y somos profesores, es posible que no desarrollemos capacidades y destrezas para enseñarlas y nuestras acciones a la hora de enseñarlas dejen mucho que desear. En cambio si creemos que no es fácil enseñar matemáticas pero tampoco imposible puede que desarrollemos nuestras capacidades para dar lo mejor de nosotros mismos enseñándolas.
¿Por qué son los niveles lógicos importantes en el TDAH?
Debido al
problema de las funciones ejecutivas las personas con TDAH, a menudo cometen
muchos errores y equivocaciones que no pocas veces son interpretados de forma
errónea, dando pie a críticas que en suelen ser desproporcionadas. Estas críticas
derivan del desconocimiento generalizado hacia el problema. Ni que decir tiene,
de los efectos devastadores que pueden tener esta clase de comentarios tanto a
corto como a largo plazo en la autoestima de las personas con TDAH, además del
resentimiento que pueden llegar a generar.
Ejemplos de
estas situaciones:
“Te has vuelto a
olvidar los pantalones Eres un desastre.”
“Siempre te
olvidas las cosas. No sirves para esto.”
“No aprendes
nunca. Ya te has vuelto a caer”.
En los tres
ejemplos se generalizan situaciones que van desde el nivel lógico de conducta
hasta el nivel lógico de identidad (la esencia de la persona). Lo que
normalmente ocurre es que un problema con una capacidad específica (funciones
ejecutivas) en ocasiones impide desarrollar ciertas destreza lo que se traduce
en conductas erráticas (descuidos, olvidos, accidentes…) Esto no quiere decir
que haya una falta de capacidad intelectual y ni mucho menos que la persona
tenga que ser vaga, tonta, maliciosa, etc…
En ocasiones las
personas con TDAH reaccionan ante las críticas tan desproporcionadas y
dolorosas no reconociendo sus errores como mecanismo de defensa psicológico o echando
la culpa al entorno o a otras personas, lo cual les hace parecer aun más
inmaduras e irresponsables…
Los niveles
neuro-lógicos pueden ser una perfecta herramienta de auto-defensa verbal y emocional
en estas situaciones en las que los fallos pueden dar pie a críticas exacerbadas.
Sin dejar de renunciar a la responsabilidad
por la acción cometida, “Tienes razón, me he olvidado los pantalones”, se puede
reconducir la frase hacia un nivel lógico menos profundo y más respetuoso con
la autoestima de la persona “aún no he aprendido una estrategia para acordarme,
pero no soy ningún desastre” Esta técnica en concreto recibe el nombre de Re-encuadre de contenido y es muy usada
en Programación Neuro Lingüística.
Aprender a
desarrollar esta estrategia tanto por las personas que tienen TDA(H) como por
los padres de niños con el trastorno, puede proteger la autoestima y construir
una identidad fuerte evitando futuros trastornos de la personalidad y desarrollando
las habilidades sociales necesarias para afrontar los retos y desafíos con los que, a
buen seguro, la persona tendrá que lidiar.
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